Las decisiones que escogemos con relación a la búsqueda de trabajo durante el tiempo que permanecemos en paro cada vez son mas complicadas respecto a el conjunto de herramientas que alcanzamos a emplear y a los canales existentes. Uno de estos medios es la carta de presentación, sobre la que continuamente tenemos dudas si es favorable o no.
En el pasado a diferencia de la actualidad, la carta de presentación era casi obligatorio que fuera acompañando al curriculum vitae. En realidad, acompañar el curriculum con una carta de presentación e incluso con cartas de recomendación, era lo habitual.
En el presente esto es relativo la transformación de los métodos de búsqueda de trabajo y las herramientas que empleamos ha modificado bastante todos los aspectos a disposición de una persona que esta desempleada y en busca de trabajo.
Cuándo es adecuada la cata de presentación y cuándo no
Podemos intentar reconocer algunos escenarios donde una carta de presentación resultara más adecuada que otros.
Normalmente, cuanto mayor sea el vinculo con el empleo al que pretendemos acceder más importancia adquiere la carta de presentación.
En caso de aspirar a un trabajo, para el que disponemos de los conocimientos necesarios, en el que podemos demostrar una buena trayectoria profesional y donde no existe una gran competencia, la carta de presentación es apropiada ya que la cantidad de información que maneje la persona encargada de la selección de personal, será menor.
En caso de estar optando a un puesto de trabajo donde su campaña de selección es masiva, en el que los responsables de selección no dispondrán de mucho tiempo para poder contrastar la información en un principio, es posible que no sea tan eficaz.
En realidad, la decisión la tienes que tomar tu dependiendo de las tus aspiraciones y del tipo de empleo que pretendes conseguir.
Tres claves los primeros días de trabajo
La carta de recomendación
No existe un modelo exclusivo para la carta de presentación. No obstante, existen algunas claves, que deberías tomar en cuenta y que pueden ser una buena idea.
En primer lugar, no debemos repetir la información del curriculum en la carta , no tendría ningún sentido duplicar la información, la repetición y el exceso de datos es un mal enemigo en el momento de búsqueda de trabajo.
Otro tema clave, es que no tiene que ser una carta extensa, en unos tres o cuatro párrafos debemos concentrar toda la información, quienes somos y que van a encontrar en el curriculum. Como mucho en un par de líneas, contaremos porque creemos que somos el candidato idóneo para el puesto de trabajo.
Por último, debe tener una redacción simple, que se entienda con facilidad, sin faltas de ortografía ni gramaticales y con una buena presentación.
